¿Crees que es un alimento poco especial? ¡Entonces no conoces los beneficios de la cebolla! Estas son las razones por las que tienes que valorarla mucho más.
Las cebollas son miembros del género Allium de plantas con flores que también incluye ajo, chalotes, puerros y cebolletas.
Estas verduras contienen varias vitaminas, minerales y compuestos vegetales muy potentes que benefician a nuestra salud de diversas maneras. De hecho, las propiedades medicinales y gastronómicas de las cebollas se han reconocido desde la antigüedad, cuando se usaban para tratar dolencias como dolores de cabeza, enfermedades cardíacas y llagas en la boca.
¡Así que anímate y descubre sus propiedades por ti mismo!
Súper nutritiva
Las cebollas son ricas en nutrientes, lo que significa que son bajas en calorías pero altas en vitaminas y minerales.
Las cebollas son particularmente ricas en vitamina C, un nutriente involucrado en la regulación de la salud inmunológica, la producción de colágeno, la reparación de tejidos y la absorción de hierro.
La vitamina C también actúa como un poderoso antioxidante y protege las células contra los radicales libres.
Las cebollas también son ricas en vitaminas B, que juegan un papel clave en el metabolismo, la producción de glóbulos rojos y la función nerviosa.
Por último, son una buena fuente de potasio, un mineral del que carecen muchas personas. La función celular normal, el equilibrio de líquidos, la transmisión nerviosa, la función renal y la contracción muscular necesitan potasio para funcionar correctamente.
Bomba de antioxidantes
La oxidación es lo que lleva a nuestro cuerpo a envejecer, lo que genera daño celular (y contribuye a enfermedades como el cáncer, la diabetes y las enfermedades cardíacas). Por eso tantos productos y tratamientos de belleza incluyen antioxidantes en su receta, ya que inhiben la oxidación.
Entre los mejores beneficios de la cebolla se encuentra que son una excelente fuente de antioxidantes. De hecho, contienen más de 25 variedades diferentes de antioxidantes.
Múltiples estudios de población han encontrado que las personas que consumen más alimentos ricos en antocianinas (un tipo de antioxidante) tienen un riesgo reducido de enfermedad cardíaca. Además, se ha descubierto que las antocianinas protegen contra ciertos tipos de cáncer y diabetes.
No suena mal, ¿no?
Controla el azúcar en sangre
Esto le interesa a las personas que sufren de diabetes: comer cebollas puede ayudar a controlar el azúcar en la sangre.
Los compuestos específicos que se encuentran en las cebollas, como la quercetina y los compuestos de azufre, poseen efectos antidiabéticos.
Por ejemplo, se ha demostrado que la quercetina interactúa con las células del intestino delgado, el páncreas, el músculo esquelético, el tejido adiposo y el hígado para controlar la regulación del azúcar en la sangre de todo el cuerpo.
(Esto no significa que puedas hincharte a tarta si después de comes dos cebollas).
¡Fuera bacterias!
Las cebollas pueden combatir bacterias potencialmente peligrosas, como Escherichia coli (E. coli), Pseudomonas aeruginosa, Staphylococcus aureus (S. aureus) y Bacillus cereus.
La quercetina extraída de la cebolla parece ser una forma particularmente poderosa de combatir las bacterias.
¡Y aún tiene más propiedades! Mejora la salud cardiovascular, aumenta la densidad de los huesos, mejora la salud digestiva… en fin, larga vida a la cebolla.
Por cierto, nuestra manera favorita de tomar cebolla es en empanadas criollas. Aquí te dejamos la receta. ¡Están de vicio!